No es novedad que existe un tipo especial de depravados, los llamados terapeutas sectarios, esos que actuan sobre los débiles alevosamente, amparándose en su licencia profesional.
Estos terapeutas seleccionan a personas vulnerables, deprimidas, asustadas, dolidas, inseguras... a las que convencen de que no se encuentran bien porque en su vida hay un error y afirman que solamente ellos tienen la forma de eliminarlo.
Generalmente son personas con un status de jerarquía superior para la persona con problemas. Son profesores, médicos, directores de algún centro, presidentes de alguna organización o asociación.
Para que el paciente pierda cualquier duda, comienza el tratamiento con una serie de vejaciones no entendidas o vistas como tales. Por ejemplo, hace vestir al gordo con ropa ajustada y le hace entender que no importa lo que los demás piensen. A la mujer que se ve fea es obligada, por ejemplo, a un cambio espectacular de cabello, como tintarse de un color llamativo que la hará más segura y fuerte ante los demás.
En tercer lugar convoca al paciente a horas intempestivas o días de fiesta; si pone peros es porque no tiene voluntad de cambio. Si fracasa la terapia, le hace saber que será el culpable por no poner empeño.
Cuando el paciente reconoce su debilidad, necesidad de apoyo y dependencia, el terapeuta le indica la cantidad de personas que están en su misma tesitura y a los que puede echar una mano. Eso le hace sentir independiente y le da seguridad.
Para eso se programan reuniones de grupo de los aventajados con los potenciales pacientes y comienza la educación en la seguridad de que esos cambios que han introducido en su vida les han sacado del problema inicial.
Es a partir de este momento cuando se vuelve el paciente hostil a los que les cuestionan porque "la familia es tóxica" y la salida del laberinto sectario se hace prácticamente imposible.
Es a partir de este momento cuando se vuelve el paciente hostil a los que les cuestionan porque "la familia es tóxica" y la salida del laberinto sectario se hace prácticamente imposible.
Aquí la opinión de uno de los mayores entendidos y su bibliografía...
La página Educasectas os dará mucha información sobre el sectarismo de los coach...
La página Educasectas os dará mucha información sobre el sectarismo de los coach...
Llevo un rato intentando acordarme de un libro en el que pasaba todo eso, y parece de película. supongo que si tenemos un carácter fuerte emocionalmente no nos pasará. Un abrazote
ResponderEliminarSer estables e informados es muy importante. Hay que estar preparados para verles venir...
EliminarUn besito.
Uno de tus parrafos me hizo acordar a un programa por acá, llamado Cuestión de pasa, donde prometen ayudar a bajar de pesos a quienes se presenten como voluntario. El detalle es que tienen una crueldad con los participantes...
ResponderEliminarQué horror... no sé si es peor ese programa o el Gran Hermano.
EliminarSon tan antiguos como la misma humanidad y están insertos en el adn de la sociedad. Lo primero que tiene que aparece en cualquier sociedad primitiva es el jefe y el brujo.
ResponderEliminarActualmente puede llamarse de distinta manera, pero son la misma cosa.
Salud(os).
Yo compararía a esos que me dices, al jefe: con gobernadores, emperadores, reyes, faraones; control de poder , de territorio y económico Y al brujo:con los sacerdotes de cualquier índole. Estos segundos controlarían lo mismo que el anterior + las mentes.
EliminarAlgo así, pero no les veo el asunto de la humillación...
Si me equivoco me lo cuentas, solo es un punto de vista...
Un saludo, compañero.
Un artñiculo muy interesante que desnuda las artimañas que utilizan esos aprovechadores. Aquí sobran ejemplos de esos "iluminados" que captan adeptos alejándolos de sus familias, haciéndolos caer en un círculo de dependencias y vejaciones que resulta increíble para quien no conoce el tema.
ResponderEliminarUn abrazo
Así es, me costó años entender qué puede pasar por la mente de una persona para dejarse captar ¿Necesidad? ¿Debilidad? ¿Inseguridad? ¿Ingenuidad? hasta cabezonería de no escuchar a los suyos creyéndose más listo...
EliminarAbrazos y cafelito.
Creo que no le tengo miedo a ese tipo de personas, nunca me deje convencer aunque estuve muy cerca de algunos que lo intentaron. Ahora de mayor me he vuelto mas desconfiada todavía.
ResponderEliminarCon este frío mejor chocolate calentito.
Siempre los tenemos cerca, rondando. La desconfianza es un buen arma defensiva si se sabe aplicar. Ya somos dos...
EliminarVenga ese chocolate.
Suele pasar a las personas con falta de espíritu...Se dejan llevar fácilmente por palabras y cambios externos, que las esclavizan y las hacen totalmente dependientes...Lo más importante son los valores humanos, que debemos tener muy claros, buena base interior para no caer en las redes de estos vampiros y demonios...
ResponderEliminarMi gratitud por tus posts siempre genuinos y originales, Verónica.
Mi abrazo grande y feliz semana, amiga.
M.Jesús
Así es María Jesús, hay personas que dudan de su existencia y se agarran a un clavo ardiendo si éste las saca de su falta de objetivos o se halla inmersa en cualquier callejón sin salida. Pero lo mismo pienso de las creencias religiosas o de algunos falso profesionales licenciados en psicología (digo falsos, eh?)
EliminarUn abrazo y feliz día, compañera. Te dejo el café de hoy. Gracias a ti.
Sumaría a la lista algunos líderes religiosos.
ResponderEliminarConocí una vez a una chica el pastor (igual da sacerdote en otros casos) sometía a las peores prácticas "preparándola" para la vida en la fe.
Muy buen artículo. Y me gustó el nombre de terapeutas sectarios.
Besos
Sí, la de niñas embarazadas del líder que salen de las sectas. Por ejemplo, el de la Fundamentalista de los Santos de Jesús del Ultimo Día. Menudos energúmenos.
EliminarUn abrazo y muchas gracias. Cafelito.
Para brujos y sectarios los políticos.
ResponderEliminarBesos censu.
Frente a esos nos humillamos solos, están ahi porque nos dejamos. Debe ser que las estelas químicas lanzan partículas que nos incitan al masoquismo...
EliminarBeset, company.
Es bueno conocer a estos grupos para estar cien leguas de ellos. Son muy peligrosos y la gente está muy sola y sólo quieren captar para manipular. Una pena. Muy buena exposición, amiga.
ResponderEliminarSiempre habrá manipuladores y manipulables, es la base de las religiones, y de allí aprendemos muchas cosas. Pero bueno, también habrá susceptibles que si dices algo semejante se enojarán...
ResponderEliminarSaludos
J.