domingo, 7 de septiembre de 2014

Lo irregular es interesante....


Entre los siglos II y I adne se acuñó en la isla de Rodos esta curiosa moneda...

Y dónde está la curiosidad, me diréis. Si la cabeza de Apolo está correcta, con sus rayos de sol en la cabeza bien ordenados y visibles*; la rosa está abierta y las letras P    O, primera y segunda letra del nombre de la isla, Rodion, en su lugar y simétricamente colocados. La flor tiene un brote a la derecha y una espiga a la izquierda. Perfecto.

Pero... siempre hay un pero en todo.

Aparte de estar mal acuñada porque el cuadrado no está en el centro del metal, el nombre del magistrado ΑΝΤΑΙΟΣ (Anteos) no aparece en el interior de dicho cuadrado como debiera,  sino que sobra una Σ, "S". 


¿Era el dibujante un novato o un chapuzas?
¿Fue sobre el nombre sobreacuñado con posterioridad encima de otro magistrado anterior?
¿O no era estimado y por eso se le dejó una "patita" fuera de la casa a modo de crítica?


Feliz día y aromático café...





* La isla de Rodos ha tenido quince nombres a lo largo de la historia, la mayoría hacen referencia a su luz, al sol que la ilumina casi todo el año; por eso se la conoce popularmente como Isla de la Luz, de ahí que Apolo Helio, o Apolo Sol, sea tan importante. De esta imagen sacaron los cristianos la suya, hasta aprovecharon todo el material.






18 comentarios:

  1. Eres una superentendida en la materia, cualquier día me iba a dar yo cuenta de todas esas imperfecciones.
    Un placer leerte siempre.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Seguro que sí las verías, solo se trata de mirar la Historia con otros ojos, interesados y curiosos. Pero ya te voy contando yo, me gusta mucho que os llamen la atención estos detalles. Yo misma disfruto cuando los encuentro.

      Muchas gracias, Tracy.

      Eliminar
  2. Acabo de descubrir tu blog y no puedo menos que seguirte porque me ha encantado.
    Un saludo y excelentes entradas :)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias, eres muy amable. En estos mmentos dejaba yo un comentario en tu casa!

      Un saludo y tu cafelito.

      Eliminar
  3. No me digas que ya entonces había falsificadores!
    =)
    Besotes!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Imagino que sí porque la pillería va en nuestro ADN...

      Las limaban para aprovechar el material y pesaban menos de su valor. Les daban un baño de oro o plata cuando por dentro no había nada de valor. Superponían el nombre de otro gobernante.
      Y actos que ni siquiera imagino.

      Gracias, compi. Beso.

      Eliminar
  4. Imagino que serían los primeros falsificadores de la historia. Porque no creo que sólo existan ahora. Pillos ha habido en todas las épocas, sólo que en esa época para falsificar mil monedas, jajajjaj, tardarían mas en currarselo que la falsificación.
    Muy curioso. Y es una alegría volverte a ver por aquí.
    Un beso.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No sé qué decirte, no quiere decir que el ser más analfabeto o menos trabajado intelectualmente, sea más fácil de engañar. Por experiencia propia sé que muchas veces es al contrario.

      Lo mismo digo, me alegra volver a dialogar contigo, compañero. Saludos a la musa.

      Eliminar
  5. Buenos días, Verónica:
    ¿Y si estamos ante una especie de venganza personal?
    El dibujante podría ser novato o chapuzas, pero también un amante despechado; que uno puede ser más o menos ducho en un oficio, pero siempre es un neófito en eso del “ars amandi”. Quizá quiso disfrazar como descuido lo que era una muestra de despecho. Vete tú a saber si el magister falto de “s” en la moneda, iba de sobrado en la vida.
    Y a seguir fantaseando.
    Gracias por avivar mi imaginación, Verónica.
    Me voy a por un café de mi patatera cafetera eléctrica.
    Sol y calma

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Mira que eres agudo...
      Se me había ocurrido que era una venganza política o personal; pero llegar ahí a confirmar que era una herida de corazón palpitante entre los dos, magistratura y ceca, se me había escapado totalmente!!!

      Seguro que fue así la historia, jajajaa.
      Y gracias a ti por azuzar a la mía.

      Sombra, sombra y fresquito. ;))

      Eliminar
  6. Como aprende una de muchas cosillas por tu blog. Resulta muy educativo.
    Imagino que así como eran de estrictos esos tiempos, el que le toco reparar este diseño, debió terminar decapitado a lo sumo. Me pregunto qué suerte habrá tenido? =)
    Besos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muy interesante tu comentario. La mayoría de las veces se hacía a título póstumo, para demostrar que esa persona merecía un despecho :)) Igual que Procopio de Cesarea, que escribió la Historia Verdadera.

      Un abrazo, compi. Te dejo el cafelito.

      Eliminar
  7. A lo mejor era alguien que odiaba la perfección y se dio un capricho. Vete tú a saber!
    Dicho sea de paso, siempre es un placer la buena información que nos traes y el buen café que nos invitas.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡¡Hola!! ¿Qué tal el verano?

      A saber...
      Gracias, amigo. El placer es mio de verte por aquí.

      Eliminar
  8. Como siempre, un placer seguir aprendiendo de tus entradas. Una pregunta: a pesar de sus imperfecciones, la moneda ¿sería de curso legal?
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Claro que sí, no se desperdiciaba nada, hasta cuando se moría uno acuñaban las monedas con el otro nombre o imagen sin fundirlas primero, sobre todo cuando había prisa. Lo que tenía valor era el material y el peso.

      Un abrazo, amigo Juan.

      Eliminar
  9. Será que una de las plumas perdidas será del ojo izquierdo porque no veo la segunda E. No obstante, a veces no veo, siquiera, la que empieza mi nombre.
    Gracias por el artículo, es como si me hubiera sentado en párvulos a escuchar una docta clase sobre la Isla de Rodas la cual, siendo griega, yo siempre la ligaba a Turquía hasta que me explicaron lo de Canarias. Entonces comprendí.
    Me ha gustado. Feliz noche.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. menos mal que soy buena profe y no os pongo deberes, jajaja!

      Un abrazo, Enrique, cafelito para los dos. Feliz día.

      Eliminar