Las grandes incongruencias de las Historia son muchas pero hay una que me parece más mayúscula que las demás, se trata de la paz armada. Aunque no se les puso ese nombre, han existido más que la que sucedió en periodo de entreguerras (1870 - 1914).
Ya sé que voy a decir obviedades y tópicos que ya sabemos, me disculpen por ello...
Ahora vivimos una de las más graves por su globalización, la propia Organización para Prohibir Armas Químicas (OPAQ), encargada de revisar y controlar el armamento en poder de cada país, imagino que se lleva las manos a la cabeza espantada por la inversión en altas tecnologías armamentísticas. Es lógico, entre Oriente Próximo, el Magréb, América del Sur, Corea del Norte y demás, se pelean en silencio y se sumergen en adelantar a los demás en armás más letales.
Ni hemos ido, ni vamos bien, pero iremos peor...
Paz y amor, hermanos...
Mi regalito de Sindel
Que triste que tenga que darte la razón, a veces me gustaría poder decir que no es así. Un abrazo
ResponderEliminarY así se nos presenta el futuro, qué tristeza. Mientras no se corrijan estas barbaridades, no hay mucha esperanza de ir mejor. Un beso enorme.
ResponderEliminarAún guardo la esperanza (ilusa de mí) que alguna vez sea posible la paz. Quiero que sean verdades las grandes utipías.
ResponderEliminarUn abrazo
utopías, quise decir!
ResponderEliminarEs triste, es cruel el camino que lleva este planeta y su humanidad. Es un sabor a impotencia que te congela. =(
ResponderEliminarBeso
Buenas tardes, Verónica:
ResponderEliminarPese a mi debilidad ante la pereza, mantengo una guerra sempiterna contra la vulgaridad.
Un abrazo descafeinado (este hígado caprichoso, que hoy le ha dado por hacerse notar)
El dibujo que nos traes hoy es de lo más ilustrativo que he visto. Se merece un premio. Detras de la imagen serena de la paloma, de la paz, están siempre los fusiles. Deplorable. Saludos.
ResponderEliminarSiempre se ha luchado por ella y sin embargo nadie parece desearla para siempre a su lado, aunque se suspira por alcanzarla. Es un mundo de incongruencias.
ResponderEliminarBesos
Desde luego que vamos mal, hay demasiados intereses en juego.
ResponderEliminarUn abrazo
Aunque haya cosas que parezca obvias hay que repetirlas y esta es una.
ResponderEliminarHombre, no creo que vayamos peor, gran parte de Europa vive una paz impensable en cualquier momento de la historia. Creo que un buen indicador es que nadie invada Estonia. Falta que esa paz llegue a otras zonas, aunque para ello debería de dejar de haber turbios intereses mineros y, ¿qué se yo?, que sí, que va a ser complicado.
ResponderEliminarBesos y hasta pronto.
Gracias a todos, personalmente creo que si una alianza de países, de momento Alemania e Inglaterra son los más fuertes, siguen imponiendo el cómo debemos vivir los demás para beneficiar sus propias finanzas, es que no tenemos ninguna paz a la vista. Mientras haya una sola familia sufriendo miseria y carencias en cualquier municipio por las rigurosas y absurdas medidas impuestas en su beneficio, no podrá considerarse que exista una paz. La paz no es ausencia de guerra sino el gobierno del estado de bienestar para todo ciudadano; por tanto nos encontramos muy, pero que muy alejados de la paz.
ResponderEliminarMuchos abrazos a todos y gracias por venir, por leerme y por vuestras sinceras opiniones. MUACS.
PAZ: UNA GUERRA ABSTRACTA.
ResponderEliminarABRAZOS
No se qué decirle. La naturaleza humana es así. Fíjese en Corea del norte con sus ensayos nucleares al mando de un tipo que al parecer el tiene solamente la razón y así tantas cosas más en esta vida que se pone del reves
ResponderEliminarMuy de acuerdo contigo y mientras un niño muera injustamente o pase hambre ¿qué paz podemos tener? Besos, amiga.
ResponderEliminarVamos a ser optimistas que ya hay mucha tragedia en el mundo pero espero que sepamos estar en paz con nosotros mismos porque de esa forma podremos con el resto.
ResponderEliminarOjala seamos más corderitos y menos lobos.
Un beso enorme.
Tristemente llevas razón, esperemos equivocarnos, sería una enorme alegría.
ResponderEliminarUn abrazo.
Me mató eso de "iremos peor..."
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