Un buen tema nos ha ofrecido nuestra querida amiga Mónica; difícil elección de textos...
Los he leído un par de veces y he tomado la decidión quedándome con el valor que doy al escritor más que con el contenido inspirador del argumento.
El elegido ha sido el de Jane Austen*.
Al final, tras el carrusel neuronal, que si el orgullo es necesario para nuestra estima y valoración, que si pasas los límites y añades apariencia pierdes el orgullo y te envaneces, que no siempre depende de uno mismo el que el orgullo que expresamos sea mal entendido por los envidiosos faltos de él, que el orgullo no debería ser una vanagloria en alta voz sino un derecho constitucional y......... que si sí que si no, he llegado a mi conclusión y estoy orgullosa de ella:
La vanidad es precisamente la falta total de orgullo...
* "La vanidad y orgullo son cosas diferentes, aunque las palabras se usan de forma sinónima a menudo. Una persona puede ser orgullosa sin ser vanidosa. El orgullo se relaciona más con nuestra opinión de nosotros mismos: la vanidad, con lo que nos gustaría que otros pensasen de nosotros." Orgullo y prejuicio.
La imagen pertenece a esta obra magnífica de Ángel Pantoja. La descripción de la misma os gustará... imagino :) Aquí.
Muy interesante. Mucho
ResponderEliminarVerónica, una magnífica reflexión sobre el orgullo noble, ese al que todos tenemos derecho, muy contrapuesto al otro concepto banal y mediocre por el que tantas veces la gente se maneja en manifestaciones envidiosas. Me encantó también ese mural metafórico que tan bien se explica en el enlace que dejaste. Muy bueno. Me alegra mucho que mi propuesta te haya incentivado a participar este jueves. Beso grande... y también yo te quiero!
ResponderEliminar=D
Como dirían los más beatos todos los pecados capitales son malos .... depende y pq todo en su justa medida no es bueno ni malo sino como se interpreten las cosas , sí pues orgullo y vanidad a veces es necesario para la vida que tenemos como digo en su justa medida.
ResponderEliminarUn saludo.
Ambas cosas terminan perjudicando nuestras decisiones. Y es cierto que son completamente distintas, pero muchas veces coinciden en la misma estructura emocional y ahí sí, creo que la vida puede ser muy vacía.
ResponderEliminarHermosas imágenes y muy buena conclusión.
Un beso.
Claro, vanidad y orgullo son dos cosas muy distintas todos tenemos un poco de orgullo y vanidad y es claro que en exceso perjudica potencialmente al ser humano
ResponderEliminarClaro, vanidad y orgullo son dos cosas muy distintas todos tenemos un poco de orgullo y vanidad y es claro que en exceso perjudica potencialmente al ser humano
ResponderEliminarComo siempre un trabajo excelente.
ResponderEliminarMe ha parecido muy filosófica tu conclusión, me voy a tener que pasar al café que parece que aclara más las ideas compañera.
ResponderEliminarTe agradezco el enlace a la obra de Pantoja, me ha interesa mucho y casi me alargue a Sevilla a verla in situ, si el calor me da una tregua.
ResponderEliminarEste orgullo es el que todos han de sentir, del otro mejor no hablar. Me anoto tu frase-reflexión.
ResponderEliminarBesos.
¡Hola! Me gusta mucho tu reflexión final. Muy bueno.
ResponderEliminar¡Un abrazo!
En qué poquitas palabras has dicho grandes verdades. Me has conquistado el corazón con tu reflexión escrita.
ResponderEliminarFelicidades
A veces se confunden, es verdad! pero ese orgullo es necesario para vivir, lo otro no.
ResponderEliminarMuy chula la obra de arte.
Un abrazo
OPTASTE POR UN TEMA MUY INTERESANTE E IMPORTANTE.
ResponderEliminarABRAZOS
Me gustan los planteos que hiciste. Una buena forma de sumarse a este jueves.
ResponderEliminarUn abrazo
Acertado planteo.
ResponderEliminarMe encanta la obra de Pantoja. La cantidad de elementos indicaría que podría ser un caos, pero se encuentra equilibrado, con apenas algunas tensiones que se llevan las mirada principal.
Besos!
Bien Censura, bien ... me quedo con esa frase: "La vanidad es precisamente la falta total de orgullo..."
ResponderEliminarun placer es siempre leerte
ResponderEliminarBuenas tardes, Verónica:
ResponderEliminarMi más sincera felicitación por tu acertada definición de “vanidad” y de “orgullo”.
Espero que estéis bien.
Un abrazo refrescante.