Nebulosas llenas de misteriosa belleza que nunca nuestros ojos verán en el firmamento, por más que captemos con las orejas las armonías de los roces de las esferas celestiales. Gases y polvo cósmico las componen. Permanentemente en el interior de las galaxias y se clasifican según... hmmmm, usando un tópico podría decir que son hombres o mujeres que brillan o no, según la mujer o el hombre que tienen a su lado.
Las nebulosas oscuras... son las que no tienen iluminación propia y se las reconoce por ser la parte oscura del cielo cuando hay muchas estrellas. Una de ellas es la nebulosa Cabeza de Caballo, una oscura y fría nube de gas.
Las nebulosas de reflexión...
Son formaciones de gas procedentes de estrellas no muy calientes que se mantienen todavía cerca de ella, reflejando la luminosidad de su origen; como ocurre con la nebulosa de Mérope.
¿Recordáis a Mérope? Sí, Mérope, la séptima hija de Atlas que huía del acoso de Orión con sus seis hermanas y que Zeus, tan "piadoso" como siempre, las acompañó hasta el firmamento para que no las encontrara, pero se equivocó porque Orión las siguió y sigue bien de cerca. Sabéis que Mérope no se ve en el cielo pero las otras seis sí, porque ellas se casaron con inmortales.
O esta que se llama Ave Fénix, cuya estrella propulsora se ve un poco coloreada de rosado...
Las nebulosas de emisión...
Son las que brillan porque están cerca de estrellas muy calientes que permiten que las estelares radiaciones ultravioleta que emiten las transformen. Esto ocurre con la nebulosa Hélice u Ojo de dios, formada por varias expulsiones de gas de la misma estrella que ahora es pequeñita y formada por el remanente de la estrella gorda original. A estas estrellas pequeñas y remanentes se las llama enanas blancas y son fáciles, a veces, de distinguir, como ésta que se mantiene y se ve claramente en el centro de la nebulosa.
Dentro de esta clasificación hay una formación especial, he visto que las nebulosas de forman de dentro a fuera, la estrella se queda en el centro porque expulsó el gas hacia fuera. Pero hay nebulosas que se forman al contrario, un aro de estrellas han expulsado los gases y el polvo estelar hacia el interior del circulo formando una nebulosa que cambia de forma porque siempre hay alguna estrella que se forma de nuevo.
Esta se llama los Pilares de la Creación - de estrellas- porque los gases salen y forman como columnas, es preciosa. Os dejo dos fotos, una general donde se ve muy bien el efecto y una del detalle de una explosión...
¿A que os gustan estas dos nebulosas juntas llamadas del Corazón y del Alma?
Besos y café celestial, jejeje...
Geniales, si señora, me ha encantado, ya lo sabías. ¿Donde diablos encontraste la última" Jajj. Bss.
ResponderEliminarJajajaja! ¿Te gustó el café divino, eh?
EliminarGracias. Beso y café, amiga.
Curioso, hoy la primera foto que he visto en la web ha sido una nebulosa también. Ahora Ud nos trae esta colección, para elegir!
ResponderEliminarMe quedo con las de emisión
:)
Carlos, hola. No me preguntes por qué, he soñado con estrellas dos noches seguidas.
EliminarGracias por venir. Besito y café.
Siempre uno aprende con vos,pero hoy particularmente, queda uno extasiado contemplando estas maravillas!
ResponderEliminar=)
besitos
Gracias, amiga. Desconocía la mayoría de ellas pero me quedé embelesada con unas imágenes tomadas por satélites de la Nasa.
Eliminarme alegra que te gustase.
Besito y cafelito.
Qué bonito! Da gusto pasarse por aquí, tienes un café excelente y siempre sale uno sabiendo cosas nuevas.Un portento, si señor!
ResponderEliminarLa entrada es realmente magnífica!
Abrazos.
Gracias, muchas gracias. No podía dejar de compartir esta belleza con vosotros. Gracias por venir a verla. Besito.
EliminarGracias, gracias, amiga meva...
ResponderEliminarEl Cosmos y lo mítico, la canción de las esferas, lo insondable, tan lejano y a la vez, tan observado que me parecen composiciones abstractas que ni el mejor artista abstracto a reflejado, aunque hay alguno que...se acercó como soñándolas a esas distancias siderales.
Polvo de estrellas y nebulosas en mi taza de café. Menos que un átomo de arena en un inmenso desierto es la tierra y nosotros en ella, algo parecido dijo Marco Aurelio. Me gustaría leer o escuchar la expresión de otros mundos, porque...no estamos solos.
Gracias por estas visiones que me disparan y me acercan.
Petons molts a repartir família.
No hay de qué, amiga. No entendemos la belleza hasta que no nos emociona y nos pone la piel de gallina. Una melodía, una composición de colores, el sonido del viento, las olas del mar. Todas esas naturalezas de las que formamos parte y que tan poco respetamos.
EliminarDelicioso el café con polvo de estrellas, un sueño.
Besos a los dos, templàts.
Es uno de los temas que busco en Internet.
ResponderEliminarMuy buenas imagenes. Gracias por el desarrollo de las astronomia, que permite verlas.
Sí, gracias al avance de la tecnología, una de las pocas cosas en las que ha avanzado el humano.
EliminarGracias por venir. Cafelito.
Verónica,me encanta el tema que tratas...Esas nebulosas,que están en retaguardia y tienen su misión y su sentido...La del alma y el corazón son una preciosidad...El universo siempre nos llama y nos atrae.Te agradezco esta entrada,que te has currado y nos inspira a todos,compañera.
ResponderEliminarMi abrazo inmenso y gracias por ese rico dafé.
Feliz finde,Verónica.
M.Jesús
¿Qué tal el fin de semana?
EliminarCreo que, entre tanta belleza, los únicos que carecemos de sentido somos los depredadores humanos; tal vez seamos la especie más carroñera del universo. La hermosura de la naturaleza que no alcanzamos, como la celeste, o la que alcanzamos a ver, como un simple brillo en las aguas del mar, son elementos que deberían de entrar en la cabeza de los que se embelesan frente a un billete de cien euros.
Quedé extasiada cuando vi la nebulosa del corazón y del alma.
Beso y cafelito, compañera. Feliz día.
A gloria me supo este café celestial. La nebulosa unidas, corazón y alma son realmente preciosas.
ResponderEliminarBesos.
Un abrazo, compi. Pronto será de cerca, bieeeeeeeeen!
EliminarCafelito.
Nebulooooooooooooooooooooooosas ♥ Las adoro, me encantan, me chiflan, me flipan, tan bonitas y a veces peligrosas o3o ¿Qué? ¿Alegrándome el fin de semana? XD Se agradece
ResponderEliminar^-^
Son realmente bonitas todas, cualquiera de ellas tiene algo especial, todas son diferentes, todas tienen colores y formas distintas. Como las personas, algunas explotan para dentro y otras para fuera.
EliminarDe nada, si te animé el día me alegro! Un beso.
Cuántos ojos nos miran desde arriba: qué fácil pues creer y crear dioses.
ResponderEliminarLa maravilla de la mitología es que gentes con medios tan precarios a nivel técnico, pero con una mente poderosa, hayan marcado, paso a paso, el camino de lo que conocemos.
La adoración y el temor a lo desconocido es tan ancestral que asusta.
EliminarAlgunos se han aprovechado de ello hasta hacernos entonar un mea culpa por todo, otros se han amarrado a un telescopio... el largo camino que nos queda todavía es infinito.
Hola!!!! Cuántos misterios encierra el cielo, verdad???? Me encanta mirar las nubes y ver figuras, me gusta ver las estrellas y aunque lejanas, imagino otros mundos y universos!!!! Besos y me tomo el cafelito celestial contigo.
ResponderEliminarY unos pastelitos de gloria, con yema y azúcar glaseado para acompañar... ¡Toma calorías! Jajajaa!
EliminarLas nubes y sus formas son algo que descubrieron los peques hace poco, las estrellas juntas son sus abuelitos, la luz del sol la que necesitamos, la lluvia fresca... todo lo que nos viene del cielo es bello. Salvo el granizo y los hoyos en los coches :))
Besos y cafelito.
Muy buenas imágenes y mejores descripciones. Nos aguardan maravillas, solo si estamos dispuestos a asombrarnos.
ResponderEliminarBesos
Siempre estoy dispuesta a asombrarme, afortunadamente es una de las capacidades que no he perdido, ni para lo bueno ni para lo malo.
EliminarUn besito y un café, amigo Oso.
A mí me alucinó la penúltima foto :O
ResponderEliminarMe hiciste acordar a las clases de astronomía, en las cuales por más que me mostraran, no conseguía ver la figura del centauro.
Lo más que llegué a divisar fueron la Cruz del Sur y las Tres Marías, jajaja.
No es de extrañar que los objetos celestes se relacionene con la mitología. Los hombres siempre hemos mirado al cielo, y tratado de "conquistarlo", aunque más no sea atribuyendolo como "hogar" de los dioses y héroes que creamosa nuestra imagen y semejanza. (off topic: últiammente estoy reconsiderando la fe como opción válida).
Siempre me llamó la elección del nombre Marte. Será que se pensaba que entraríamso en guerra con sus habitantes? Al fin y al cabo, parece que terminaremos invadiéndolo, nomás.
Buenísimo posteo, Censu.
Beso, y buen finde :)
No me asustes ¿La fe en qué?
EliminarAres, el dios que representaba el carácter guerrero y a quién no le importaba apoyar a un bando o a otro. Cuenta una leyenda que Hera quedó embarazada de Ares cuando rozó con sus dedos una cierta flor. Hasta en los luchadores implacables hay belleza y ternura, ya ves.
Pues yo me quedo con la Osa Mayor y nada más :)))
Caray! Clases de astrología! Qué suerte!
Muchas gracias, mi ojito derecho. Un beso y cafelito. Feliz semana.
La del ojo de Dios y la del detalle de la explosión son espectaculares. El texto que acompaña las fotografías es ameno y con mucha información. Exquisito aporte. un beso y otro café pero más terrenal jeje
ResponderEliminarGracias, Luis. Había tantas bellezas nebuloseando que no sabía decidirme...
EliminarUn beso y un café. Feliz semana, amigo.
Sin palabras... pensar que somos una nadita entre tanta inmensidad. Son una belleza esas tomas de figuras tan sugerentes. La mitología le ha dado nombre y sentido a muchos de esos fenómenos, lo que hace que adquieran una magia especial. Más aún.
ResponderEliminarMaravillosa entrada amiga, me tomo el café perdiéndome en el espacio esta vez, da gusto.
Gaby*
Pues te espero en la nube con forma de liebre, la de las dos orejas a la izquierda. Llevo café y tarta de chocolate. Ya voy. Ponte calcetines gruesos que hace frío allá arriba.
EliminarMuchas gracias. Un besito.
Vaya, bonita entrada no me la esperaba. Me ha recordado la última vez que vi el firmamento en todo su esplendor. Una noche de agosto en Griegos, unas mil-quinientas curvas después de Albarracín y sin contaminación lumínica, ¡que espectáculo!, ya no lo recordaba. Que maravilla. Tengo que llevar a mis hijas a contemplar el cielo.
ResponderEliminarBesos.
Llévalas, que disfruten pensando sobre estas sensaciones de placer inexplicables. No lo olvidarán. Puedo imaginarme la belleza desde tus ojos; seguro que tú apreciarás desde los míos una puesta de sol en el Egeo, aguas azul brillante, cielo del mismo color del mar y una bola enorme y naranja atravesada por la mitad por un diámetro de nube completamente blanca. Va cayendo el sol dentro del mar y desaparece. Callan los pájaros unos segundos. Todo en silencio.
EliminarPuedes imaginar que se me quedase el café frío...
Un abrazo, Carlos.