Hemos llegado a mitad de mes y he visto una imagen del recuerdo, no recuerdo personal sino fílmico, que me ha transportado a los agostos españoles de hace medio siglo ya.
Esos agostos que han tenido su gracia en algunas películas del terreno -a muchas no les hará gracia, ya sé, a mí tampoco pero hay que saberse ubicar en el contexto- en las que aparecían las típicas entradas en carnes primerizas veraneantes suecas.
Ocurría por primera vez en Benidorm, durante el verano de 1959, la llegada, tras un larguísimo viaje de autobús, de las primeras rubias que dejaron boquiabiertos a los de pelo en pecho, ya hasta el moño de ver a las españolas con su sotana mental cara al mar. Evidentemente, también pesaba como una manta mojada a las que lucían ese raso psicológico. La muestra del ombligo no trajo una imagen más sexi, erótica, elegante, fashion o glamurosa, porque estos conceptos son tan personales como únicos y están donde se quieren ver.
FELIZ MES
CAFELITO PARA TODOS
Una gran innovación. Me suscribo a celebra a esas suecas.
ResponderEliminarESTO SIGUE CAMBIANDO, Y LOS OMBLIGOS DESNUDÁNDOSE.
ResponderEliminarBESOS
Día de playa y yo sin tanga :S
ResponderEliminarTe dejo un beso y me llevo un cafelito - carajillito para aliviar el frío austral
El destape de los ombligos fue una revolución, ahora es el destape de tetas !viva la Pepa! Vivan los vikingos rubios que también hicieron furor.
ResponderEliminarUn cafelito frapé medio con bikini mini.
Petons quatriplicats!
Qué revolución aquella... Censu, y ya todo es ombligo al aire libre, todo se fríe al sol y se cuece en la arena...
ResponderEliminarPrefiero tu cafelito a la sombra, si no te importa... Gracias mi amiga. Besos.
Yo era flaca como una libelula, tenia un ombligo peculiar...aun asi, lo deje libre (que me importaban a mi un comino los canones de belleza)
ResponderEliminarAiiisssss hoy casi no se me ve, enterradito en años.
Un besazo, amiga
¿Cuándo aprenderemos a guardar nuestra compostura ante un poco más o menos de piel?
ResponderEliminar¿Cuándo?
Saludos!
J.