LA INSCRIPCIÓN DE BEHISTÚN
En un acantilado de los elevados montes Zagros situados al oeste de Irán, a 100 metros de altura, existe una inscripción decorada con textos y figuras en la piedra.
En ella se cuenta, en tres idiomas pero con los mismos signos cuneiformes para que todos pudieran leerlo y entenderlo, los que sabían, claro: babilonio, elamita y persa antiguo, la historia de una hazaña de Darío I, rey de Persia entre los siglos VI adne y V adne. Le vemos aquí con la mano de vencedor y el arco.
A Darío le gustaba de que todos supieran que había logrado un buen puesto tras derrotar a uno que se había declarado rey asesinando al otro rey, a un regicida. Incluso venció los últimos coletazos de grupos rebeldes amotinados contra él mismo porque no le querían como gobernador.
Lo que me interesaba de esta inscripción, más que el cómo y el por qué y porque soy un poco macabra, es que afirma lo que ya se sabía por los textos, sobre la forma en que los persas hacían pagar a los traidores, la manera de imponerles su pena.
Uno de los rebeldes contra Darío fue Fraortes, a quién el mismo Darío cortó las orejas y la nariz. También Alejandro Magno, rey macedonio, mutiló de la misma forma y Darío repitió esto de forma habitual.
Todos los que aparecen frente a él son los vencidos, nueve sátrapas (gobernadores de provincias) que se opusieron a Darío los primeros años de su reinado, maniatados y con una soga en el cuello que los une, y otro bajo los pies del rey.
La última figura parece el enanito de Blancanieves. Perdón, un respeto...
Por último, para ver la grandeza de todo, podemos ver el tamaño de las figuras y la cantidad de texto en el esquema.
GRABADO DE 1.846
El aguilucho, el que puede verse en la primera inagen, es FARAVAHAR, el símbolo de los aqueménidas o persas.
Aquí se ve mejor, en la puerta de Persépolis...
Si queréis saber más sobre esta figura, aquí está muy sencillamente explicado cada uno de sus elementos CLICK
Cafelito para todos y feliz día...
Bonita forma de aprender cosas de otros tiempos muy interesantes.
ResponderEliminarVoy haciendo acopio para ver si algunas de ellas se pueden trasladar y ejecutar para nuestros "benditos gobernantes".
El cafelito muy bueno, como siempre.
Un abrazo.
Vale, hecho, yo voy de abanderada con la cimitarra en el cinto.
Eliminar¡¡Seguro que formaremos un gran ejército de vengadores!! ¡¡A las armaaaas!!! :))
Un abrazo, balamgo.
Me tomo el café, he llegado hace poco de comer y por las prisas no me lo he tomado,gracias está riquisimo. Y ahora voy a leer mas detenidamente tu entrada, que es para no tener prisa y si gana de saber. Un abrazo
ResponderEliminarHe puesto poquito texto para que no se haga pesada, solamente quédate con la obra de arte y la ubicación espacial, es preciosa.
EliminarDe nada, mañana te preparo otro. besito.
¡Qué fantástico! Me producen una fuerte fascinación los grabados antiguos, tallados en piedra, etc. Tanta como la capacidad de perseguir pista por pista las huellas de estas civilizaciones para comprender aspectos de su cultura, su forma de comunicar... en definitiva, huellas de lo que fuimos.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo
¿Sabes qué es lo más emocionante? Que haya investigadores capaces de unir varias ramas del conocimiento afines; por ejemplo, se habla mucho de Heráclito como filósofo, pero nadie se atreve a hacer un estudio de personalidad según su ambiente socio-econónico-político. Los que saben griego, simplemente le traducen; los filósofos divagan que da gusto; a los sociólogos ni les importa ni saben griego ni filosofía... Alguien que abarque las tres ramas puede hacer una investigación perfecta. Lo mismo con los textos clásicos y la arqueología...
EliminarDe lo que fuimos y de lo que somos, porque siempre queda.
UN abrazo bien gordo y tu cafelito.
Interesante. Gracias por traerlo. Besos.
ResponderEliminarGracias a ti. Un abrazo.
EliminarRealmente una maravilla de entarda, como siempre Compi, me encantan éstas explicaciones con tu toque especial de humor... ojalá hubiera tenido una profe de historia con tu chispa, pues la que tenía era tan desastrosa que me dormía en clase jaja. (y no era la única)
ResponderEliminarBesos y cafelito, por supuesto x 4!
Mi primera profesora de Historia en el Instituto llegó a clase recién salida del manicomio y hacía cosas muy raras, de tanto en tanto se metía dentro de los armarios de clase y se quedaba ahí, llamábamos al director y la sacaban de allí. Al final nos acostumbramos, pero al principio fue traumático... la pobre.
EliminarYo creo que siempre me gustó la historia y las historias, siempre me ha gustado escuchar acontecimientos... estudiarnos no tanto, jajajaja!
Muchas gracias, Adriana.
Un gran abrazo y tu cafelito especial de Compi.
Es muy interesante la inscripción, como propaganda es increíble, porque sí que ha perdurado en el tiempo, a pesar de la acción de los elementos y la siempre dañina acción del hombre.
ResponderEliminarTambién es de notar lo que la inscripción dice y lo que no dice. Como toda propaganda, enumera todas las victorias pero no menciona las derrotas, ¿cuantas serían esas?, sabemos de una por lo menos, la que se llevó en Grecia.
También son típicas la lecturas que se hicieron de la inscripción antes que se pudiera traducir, desde los historiadores antiguos hasta algunos modernos pero fantasiosos. Entre las teorías más locas están la que postulaba que el monumento representaba a Cristo y sus apóstoles o la que decía que eran las doce tribus de Israel. Menos mal que actualmente se ha regresado el crédito al verdadero autor y actor, el rey Darío I el grande.
¿Por casualidad, las interpretaciones eran francesas o alemanas? Suelen ser bastante fantasiosos, hasta cambian la realidad para que sus teorías encajen...
EliminarClato que era propaganda, era la prensa de la época, igual que ahora que solo se dice lo bonito y una mentira tras otra. Me parece que no hemos avanzado en nada más que en lo tecnológico y lo científico porque en cuanto a forma de pensar...
Gracias por el comentario, siempre aprendo contigo, eres muy amable.
Muy curioso, esto de las estatuillas y las inscripciones, y hay que ver lo bien que se conservan. Pero eso del gachó ese de cortar las orejas y la nariz, está muy feo. Lo que hay que cortar directamente son las pelotas. Tu profesora no estaba zumbada, ya que esas cosas que hacía entran dentro de lo normal. Igual los zumbados eráis los alumnos.
ResponderEliminarBesos Censu y cuidadín con el café, que mucho pone de los nervios.
Es que cortar las pelotas no era evidente cara al público porque estaban tapadas, aquellos chicos eran muy decentes y muy de pro. Las orejas y la nariz quedaban expuestas a la vergüenza.
Eliminar¡¡¡Jajajaa, zumbadas éramos porque el instituto de las chicas!!!
Mi café no perjudica, es de calcetín :))
Besito, Rafa. Ya viene el finde!
Mas vale tarde....y me refiero a las cosas que aprendo mientras te leo, ya te lo he dicho muchas veces, me encantan estos viajes a través de la historia, sería fantástico, cafelito en mano, oirlas de tu voz.
ResponderEliminar... Y no, no me pasa nada raro, no pasé por tu casa, ni por las demás casas de jueveros, hay dias apaticos, otros ajetreados que casi no da tiempo a respirar y otros...esos mejor ni contarlos. Pero nada irreparable, amiga. Lástima no pueda darte un achuchón este fin de semana.
Bueno te dejo aqui unos cuantos besos.
Me tenías procupada, se quiere a los amigos del blog.
Eliminareste finde te llegará un abrazo muy especial de parte mía, se lo he encargado a Vívian porque yo tenía muchas ganas de conocerte.
Chelo tiene mis teléfonos.
Un beso bien grande y un buen fin de semana que seguro lo será con tantos amigos. Un abrazo especial a Pepe, Toñi, Chelo y Nieves y a todos los demás. Una cervecita a mi salud.
Muy interesante tu entrada.
ResponderEliminarOye Podría ser té en lugar de café?
Ya tienes el té sobre la mesita con un par de galletitas de naranja caseras. Gracias.
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