Hace un año ni por asomo hubiera hecho esto...
Hace un año ni me hubiera atrevido...
Hace un año ni de broma lo pensé...
¡Apúrate!
¡Modifícate!
¡Deja que se te salga algún muelle del colchón!
Y hoy algo distinto...
¿Qué tal un cafelito mientras nos pasean?
La perfección no suele ser divertida.
ResponderEliminarY tanto que cambia! y menos mal que lo hace.
ResponderEliminarVenga ese cafelito.
Ya sabes, hay que renovarse.
ResponderEliminarMe gusta la foto, aunque no se yo el pobre hombre...
Venga un cafelito.
Ya te digo si cambia la cosa...
ResponderEliminarNo importa que las cosas cambien, lo importante es que aceptemos y nos adaptemos a ese cambio...con sentido del humor, como haces tú.
ResponderEliminarMi abrazo y gracias por ese cafelito, Verónica.
M.Jesús
Desde luego que todo cambia y gracias a ello nos mantenemos siempre en estado de alerta, lo cual es bueno para nuestro cerebro,hay que adaptarse.
ResponderEliminarBesos
Desde luego que todo cambia y gracias a ello nos mantenemos siempre en estado de alerta, lo cual es bueno para nuestro cerebro,hay que adaptarse.
ResponderEliminarBesos
Tolstoi lo dijo: "Muchos piensan en cambiar el mundo, pero nadie piensa en cambiarse a sí mismo". Yo no quiero cambiar de café... El tuyo me sabe a gloria bendita.
ResponderEliminarMe gusta ese invento, no lo había visto nunca. Saltibrincos como los de siempre, no los he cambiado
ResponderEliminarJajaja muy simpático ese cambio, me animo si me voy a ver así de feliz.
ResponderEliminarMe encantó ese carro, un paseo distinto a todo.
Beso enorme.
Ahí, comparto lo que dices.
ResponderEliminarY no se porqué me ha venido a mente parafrasear aquel slogan diciendo que "el cambio es bello". Será por el orangután.
Besos.
De tan feo, es la mar de simpático.
ResponderEliminarBesos.
Es verdad que cuando echamos la vista a tras nos damos cuenta de un montón de cosas que hemos realizado y que ni por asomo habíamos pensado que podíamos hacer, quizás por ello hay que lanzarse más y vivir la vida que son dos días.
ResponderEliminarbesos
Gracias por venir y desmelenaros al viento, hay que hacer cambios en la vida de uno, aunque sea una horquilla en el pelo o unos calcetines amarillo fosforito. Atreverse, reirse y ser feliz con el cambio. Como dice Ilesin, mirar hacia atrás y ver la cantidad de horquillas y calcetines que nos hemos atrevido a poner en el pasado. Sonreir con nuestra valentía, con ese echarle cara a la vida, a las novedades, a lo imposible, a lo que no nos atrevemos.
ResponderEliminarUn beso y a pasear con ese cafelito arrastrado. Gracias.
Hola! Esta bien que todo se vaya modificando, y la mayoria de las veces para mejorar. Estamos acostumbrados vivir a cien por hora todas las novedades, y ya no nos afecta. Pero lo que no me gusta nada, pero nada, es que los inviernos parezcan primaveras, y que los otoños sean tórridos veranos. Este es una cambio contranatura.
ResponderEliminarSaludos.Y perdona que nunca te acepte el cafe, ya sabes que no me gusta. Espero que algún dia traigas un chocolatito caliente y unos churros. Muchas gracias!
Dicen que cuanto más cambian las cosas más siguen igual... ¿Será cierto?
ResponderEliminarLa frase me la robé de una película...
Saludos,
J.
La vida es cambio... Siempre...
ResponderEliminarUn abrazo, y un café...
ResponderEliminarSi el cambio es para sentirnos feliz, a tono con los colores alegres y tristes de la vida, vale la pena. Un encanto de humor. Seria excelente tomar de esa forma un cafecito.
Beso
Los cambios son los que nos hacen saber que estamos vivos..., que hay que espabilar.
ResponderEliminarEsa idea del café rodado...
Un besazo.
Y si ese cambio es a mejor, más felicidad.
ResponderEliminarSaludos
Mirar para atrás nos sirve para vernos en el espejo del pasado y comprobar cómo nos vamos transformando. Que sea para bien!
ResponderEliminarUn abrazo
Borges decía que "sólo los muertos y los tontos no cambian"... así que felicitaciones por ser tan "viva" (en todos los sentidos!)
ResponderEliminarUn besote y mi cafelito!
Triste y aburrido seria si no hicieramos cambios en nuestras vidas. Besos.
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