Me tildan de niña bien, de haber nacido en una familia de ricos comerciantes de alfombras. Dicen que mis revolucionarias ideas surgen de la mente de una mujer ociosa, qué saben ellos.
Las características de varios periodos de la historia favorecieron el enriquecimiento de mis antepasados, quienes afianzaron su fortuna con el impagado trabajo de los esclavos.
Trajeron a España a las mejores artesanas sin importar ni su color ni su edad, bajo la promesa de casa y salario justo, y consiguieron que las maltrechas manos de las mujeres les tejieran filigranas.
Pero las leyes las imponía mi familia:
Una alfombra mal tejida no da derecho a dos comidas diarias durante tres meses.
Mujer recién parida puede trabajar.
Las madres pueden amamantar durante el trabajo.
Las jornadas reglamentarias son de 16 horas si no aprietan las demandas, en ese caso habrá una sesión de dos horas de sueño cada diez horas de trabajo.
El aseo se realizará un día por mes y podrán usarse dos litros de agua por persona.
La pastilla de jabón se entregará cada dos años.
Las ropas se lavarán en una única tina.
...
...
Mi familia es rica en injusticias y crueldad, y así lo hice saber en la publicación diaria más leída.
La idea de un paraíso terrenal en el que los hombres vivirían como hermanos, sin leyes y sin trabajo agotador, estuvo obsesionando a muchas imaginaciones durante miles de años. Y esta visión tuvo una cierta importancia incluso entre los grupos que de hecho se aprovecharon de cada cambio histórico.
Como muestra de ello, hago saber que la familia Güell* ...
No soy una simple colaboradora del diario, soy la dueña.
Cada céntimo que logré para abrir la sede editorial fue ganado con mi esfuerzo y mi nombre no figura ni en la columna que corre de mi cuenta.
Sabía que mi padre visitaría hoy el periódico buscando al responsable de dicha información.
Será interesante la charla...
Cafelito frente al mar...
* En el Puerto de Barcelona hay un monumento dedicado a Antonio López López, tratante de esclavos en las Antillas, su hija se casó con el mecenas de Gaudí, el adinerado Eusebi Güell que le inspiró el famoso parque . Eusebi era hijo de otro traficante, Joan Güell i Ferrer. El primero de los presidentes de la Caja de ahorros y Monte de Piedad de Barcelona, Josep Xifré fue otro de los que llenaron sus arcas; y la familia Vidal-Quadras, los padres de las hemanas Koplowitz, la marquesa de Peñalver Esther Romeu de Juseu y Armenteros que era una aristócrata cubana, Pablo Epalza que fundó el Banco de Bilbao, María Cristina de Borbón, Leopoldo O'Donnell que ordenó la masacre de los esclavos tras su revuelta en Cuba o Antonio Cánovas del Castillo que luchó a muerte en contra de la abolición de la esclavitud...
...información libre de la red...
...información libre de la red...
Bien por la actitud del personaje. Bien hecho por denunciar a su familia.
ResponderEliminarTe felicito pro aprovechar cada oportunidad y convocatoria para sacar a relucir estas joyitas que no siempre se conocen. Lamentablemente la historia de occidente se labró sobre la opresión y la explotación de tantos anónimos que la historia ya ha decretado al olvido.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo
Has tratado la propuesta del relato con maestría, tus denuncias son eso denuncias sin vuelta a tras y se siguen cometiendo, sigue habiendo esclavos.
ResponderEliminarUn abrazo
Buenos días, Verónica:
ResponderEliminarMe gustaría que te sentaras junto a los tuyos y disfrutaras de la fresca brisa de la mar a estas horas, mientras quienes te leemos os preparamos el desayuno.
Imagino que tú tomarás café, a ver cómo me sale al estilo griego.
Ahora, si me lo permitís, me siento junto a vosotros y te cuento lo mucho que he disfrutado con la habilidad con la que has hilvanado este cuento. El cuidado y la manera sutil con que has desarrollado la trama ha atrapado mi atención. Creaste un suspense que llegó hasta el final, un final que no esperaba.
La extensión es la justa, sin palabras redundantes ni giros de una artificiosidad que equivocadamente asociamos a “lenguaje literario”. Nunca habría podido escribir esto, al igual que no sé hacerlo así. Tiendo al exceso y a lo artificioso. Gracias a leerte, intento corregir mi facilidad para el exceso.
Sinceramente, Verónica: gracias por compartir tus historias. Aunque suene “ninocéntrico, disfruto y aprendo con ellas.
Un cálido abrazo para los cuatro.
Nino
P. D.
Os mandé un emilio, espero esta vez haberlo hecho bien.
Muy interesante. Y es que hasta en las mejores familias cuecen habas.
ResponderEliminarUn abrazo
Un relato duro y emotivo. Una denuncia necesaria y merecedora. La esclavitud siempre ha existido desde tiempos antiguos, en algunos casos por prejuicio racista. Lastimosamente esas sociedades de antaño, estudiadas, refinadas y apoderadas carecían de sensibilidad humana. Aún sigue existiendo en el presente, pero la técnica usada es otra. Fue un gusto leerte.
ResponderEliminarSaludos
ACTUALMENTE HAY FAMILIAS QUE TODO LO QUE TIENEN ES SUCIEDAD Y SON MUY RESPETADAS. (LACRAS QUE SOMOS NOSOTROS!!!)
ResponderEliminarUN ABRAZO
Una de las familias mas adineradas de mi ciudad son los del Negrero. Ahi lo dejo.
ResponderEliminarEn este pais hay mucho desconocimiento de su propia historia, no se porque sera.
Un cafe de las colonias, por favor.
Te juro que al leer los avisos se me heló la sangre, sé que pasaron estas cosas, sé que el hombre muchas veces fue una inmundicia, pero de todas maneras no deja de caerme mal recordarlo. Y tampoco estamos tan lejos de esa esclavitud, solamente que en la actualidad está un poco más encubierta.
ResponderEliminarUn beso enorme.
Asi es, amiga, la historia siempre viene a ser una historia de la infamia...
ResponderEliminarUn texto que nos invita a pensar
Un abrazo fuerte
Me has dejado apabullada leyendo tu aportación y viendo lo bien que has aprovechando la situación para ponernos al corriente de todo esto.
ResponderEliminarTe felicito y te lo agradezco.
Un abrazo.
Tanto no sale de nada, aquí dejas una joya, para seguir indagando. Interesantísimo,como siempre.
ResponderEliminarBesos.
Muy oportuno... pero qué nos creíamos que era oro todo lo que relucía.
ResponderEliminarAquellas alfombras que tejieron con su vida, hoy y siempre han escondido la Basura Real. Ya lo dice el dicho: Quién olvida su historia está condenado a repetirla.
Me quedo con el cafelito, lo otro me deja mal sabor de boca.
Besos
Vaya historia más impresionante! No imaginaba que eso pudiera ocurrir aquí...los anuncios del periódico me han dejado helada.
ResponderEliminarSiempre lo he dicho: hacerse rico honradamente es imposible.
ResponderEliminarEn tu linea informativa y con tu sello, por ello una vez mas, gracias compañera.
Besos incluidos.
Bueno, pero mejor que sean ellos los esclavos y no nosotros, ¿no es cierto?
ResponderEliminarEn Argentina tenemos estatuas para militares y genocidas por todo el territorio y no mucha gente se hace problema por ello...
Saludos
J.
Creo que leí prácticamente todos los que tenían esta consigna, pero éste en particular merece un destaque por el tema y por la creatividad. Muy bien.
ResponderEliminarUn abrazo.
HD
GRACIAS, AMIGOS.
ResponderEliminarNO ES QUE ME FALTE TIEMPO, ES QUE ESTOY CARENTE DE ÉL POR COMPLETO.
LOS RATOS QUE TENGO LOS EMPLEO EN CAMUFLARME CON LA TAPICERÍA DEL SOFÁ.
UN BESO A TODOS. OS QUIERO Y PROMETO SOLEMNEMENTE LEEROS A TODOS HASTA TRES VECES CUANDO COMIENCE EL COLE... PACIENCIA CONMIGO, SI?
wow!
ResponderEliminarQue bien escrito¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡. que decirte que venir de vacaciones y leer esto.... Para que digan que volver de vacaciones es malo. No si lees este realto con tintes de realidad.
ResponderEliminarUn beso