Y a Zeus le gustó el pastorcito, hijo de un rey troyano, el guapo entre los guapos Ganímedes. Si convertido en toro se llevó a Europa, la chica de cara de bollo, convertido en águila se llevó volando al pastor; como compensación y para que no llorase le entregó a él una gallina y a su padre dos caballos de lujo, con ello acabó el problema.
Las representaciones de este rapto son tan, pero tan, tan, tan bonitas como algunas de las que os dejo aquí, con mis mejores deseos y mucho cariño.
Os habéis fijado en la sonrisita de Zeus de la primera imagen, eh que sí?
Baldassare Peruzzi lo pintó así para la Vila Farnesia... con ambas cabezas, águila y chico, mirando hacia arriba a la derecha.
Y Rubens... con la misma disposición de las cabezas, mirando arriba a la derecha. Me encanta el banquete que están celebrando arriba a la izquierda, lo veis?
Y así, Caravaccio...
Muy similar la de Rembrandt y fabulosa la cara de Ganímedes niño, no puedo evitar pensar en que siente asco más que miedo, el gesto de su rostro es de repelús, extraordinariamente bien logrado.
Y Rubens de nuevo, unos veinticuatro años después... igual disposición pero más escorzada, bonita, eh?
Totalmente diferente es la representación de Berter Tholdvalsen, ya entrado el siglo XIX, donde el Ganímedes adolescente ofrece agua, con sumo cuidado, al águila, me parece muy dulce el gesto.
Viendo esta última imagen y comparándola con la primera, me doy cuenta de que la sonrisa y relajación de los gestos, de Zeus en la primera y de Ganímedes en la última, son similares y delicados para uno con el otro.
Un gran abrazo a todos y gracias por venir...
Que curioso que Hera no haya reaccionado con sus celos y haya lanzado una venganza contra Ganimedes. Tal vez no lo haya visto como un competidor.
ResponderEliminarArtisticas pinturas las que inspiró esa historia.
Y que Ganimides sea un satélite de Júpiter.
Un abrazo.
Estos dioses griegos antiguos no se preivaban de nada! jeje
ResponderEliminarMe fijo en la representación de Ganimedes niño (Rembrandt) y observo que además del gesto en la cara el pintor dejó ver que el pequeño también se orina -de espanto, coincido-!
Un post de tu mejor estilo
=)
Un abrazo
Qué grande el copero de los dioses.
ResponderEliminarMe ha encantado esta recopilación Censura. El más raro me parece el de Caravaggio, pareciera a juzgar por la expresión, querer dejarse llevar. Y además me gusta el formato vertical y el perro allá abajo sin poder hacer nada.
Los dos de Rubens son fenomenales. La expresión en el de Rembrandt es inexplicable.
Un buen viaje nos regalaste
Beso!
El toro, el cisne, el águila, la lluvia dorada, todo porque en la época de los dioses griegos no existía el tinder, que si no...
ResponderEliminarSaludos!
J.
Las ilustraciones con las que has ilustrado el epígrafe de la mitología griega, me han encantado además de estar estupendamente escogidas.
ResponderEliminarImpresionante todos los cuadros que nos dejas en tu post , y sobre todo el significado de esa majestuosa ave el aguila , que tiene un simbolismo con lo heróico de los dioses ..así es como lo veo .
ResponderEliminarUn abrazo y gracias por compartir tanto arte .
Impagable esta lección sobre Zeus y Gamínedes, y escogidas con timo las obras que acompañas.
ResponderEliminarEntre la primera y la última imagen, puede comprobarse como la costumbre termina por borrar todos los pesares y la convivencia olvida los sufrimientos primigenios.
Lo demuestra esa entrañable manera de atención y el cuidado que se intuye en la última composición.
Saludos.
Hace muchísimo que terminé el instituto. En las clases de griego se disfrutaba con las traducciones y cada vez que entro en este blogs, el perfume de COU vuelve a mi memoria con todas esas historias que estaban dormidas....
ResponderEliminarSe acepta ese café
Impecable y bella entrada!
ResponderEliminarMe alegro mucho tu visita querida Compi, te dejo un fuerte abrazo y aunque un poco adelantado, mis mejores deseos para las proximas fiestas.
Besos x 4
Que bello el mundo de los mitos, cuando los dioses y los humanos se relacionaban para lo bueno y lo malo... Precioso trabajo, amiga... Me alegro muchisimo de verte...
ResponderEliminarUn abrazo fuerte
Bellísimas ilustraciones para una bellísima historia, Verónica.
ResponderEliminarBesos y tu cafelito